La novela A nadie le importa Brendan cumple un año

En el día que mi primera novela publicada cumple un año, me apetecía mucho sentarme frente a Brendan y preguntarle cómo deberíamos celebrarlo. La única respuesta en claro que hemos sacado ha sido un: nada grandioso, solo tú y yo.

Porque Brendan lleva existiendo mucho tiempo en mi mente y, para mí, sigue siendo ese amigo al que vuelvo cuando me siento un poquito triste. Para mí no es nada especial el hecho de que cumpla un año, porque su historia tiene unos pocos más.

Hemos recorrido mucho hasta llegar a donde estamos y, aunque me cueste creerlo, he conseguido mucho en este año en el que la historia de Brendan está accesible a todo aquel que quiera leerla.

No he cumplido mi sueño de ser una escritora que vive de esto en su primer intento. Siempre he detestado que se romantice este proceso de cumplir un sueño. Hay escritores que afirman que no han hecho nada de esfuerzo, solo escribir con el corazón y con el alma, que el resto vino después y casi de manera rodada.

Me gustaría mucho creerlos, pero visto lo visto, ese no es mi destino. Quizás yo tenga que trabajarlo un poco más, quizás yo nunca llegue a conseguir lo que tanto quiero. Pero quiero pensar que está bien.

Está bien porque en este año he crecido mucho como persona, he ido evolucionando para bien. Y por mucho que quiera negarlo, por mucho que me frustre pensar que aun no estoy donde quiero, debo admitir que dar el paso de publicar A nadie le importa Brendan ha sido uno del que no me arrepiento.

Sí, sé que ha tenido sus cosas malas. Sé que la promoción no ha sido muy intensa, que no he invertido tiempo en buscar lectores, pero estoy contenta con el resultado que he obtenido.

He publicado A nadie le importa Brendan por un deseo egoísta: quería tener, al menos, un libro publicado. Y no podía estar más contenta con el resultado. Adoro la historia, adoro la forma en la que está escrita y la forma en la que ha evolucionado a través de la corrección y de la maquetación.

Ha sido un año intenso, cargado de emociones y de quitarme muchos miedos y muchas inseguridades de encima. He disfrutado de cada crítica que me han hecho (la mayoría positivas). He disfrutado presentando por primera vez el libro en la biblioteca de mi barrio (el mejor sitio para empezar). He disfrutado de una charla sobre el tema que trata la novela donde las personas han participado y han hablado de Brendan, aunque no sabían mucho de él. He disfrutado de hacer un taller de escritura para unas chicas maravillosas que estoy segura que se comerán el mundo. Y he disfrutado hablando con alumnos y alumnas sobre mi novela, verles interesados, por poco que fuera, ha sido una auténtica gozada.

Estoy muy contenta con todo el camino que he recorrido y lo mejor de todo es que esto es solo el principio. No sé qué va a ser de mí a continuación, no sé cómo voy a proceder con mis siguientes historias, pero lo único que sé es que me siento feliz con esta historia y que no podía haber sido de otra forma más que de esta.

Gracias a las personas que se han interesado, que han leído, a las que leerán y (qué diantres) a las que no les ha interesado para nada. Gracias Brendan, Ryan, Alice, Kristen y gracias Lidia del pasado por ser tan valiente como para dar el paso de autopublicar esta historia.

¡Feliz primer cumpleaños A nadie le importa Brendan!