Sobre relatos y cómo no convertirlos en novelas

Etiquetas: Escritura.

En la vida me he encontrado con muchas personas que aseguran que escribir relatos es un arte bastante complicado. Lo cierto es que a mí me sale de manera natural así que nunca me he preguntado qué es necesario para hacer un relato y no querer convertirlo en una novela.

Sin embargo, voy a hacer un esfuerzo para dar unos consejos (o no sé qué son), que podéis seguir (o no) para intentar adentraros en el maravilloso mundo que es los relatos. Ejemplos incluidos para que veáis que no es tan difícil como parece (habrá spoilers, así que si no queréis destriparos los relatos os aconsejo que os lo leáis antes).

Primero recordar que un relato no es más que una historia breve. Hasta 500 palabras se considera microrrelato y de 501 a 15000 palabras relato (esto es mi opinión. No es una ciencia cierta y puede variar según a quién le preguntes).

Vayamos a la cuestión principal:

1. Escribe sobre sentimientos

Muchas veces se recomienda llevar diarios. La rutina nos da espacio para escribir sobre las emociones que hemos sentido en ese día. Algo tan sencillo y complicado como, por ejemplo, una ruptura. Es algo que no debería ocupar muchas páginas (a no ser que te explayes y detalles las cosas como un auténtico Tolkien). Un ejemplo de ellos es el relato de ‘La despedida’.

Sin embargo, podéis hablar de felicidad, tristeza, celos, odio, miedo o incluso filosofar sobre conceptos (como hice con ‘La friendzone’). Todo lo que se os ocurra, todo lo que os haga sentir una presión en el pecho puede ser expresado en un relato.

Recordad que no todos los relatos tienen por qué tener una finalidad. Cuando se trata de sentimientos, debemos ser libres de escribir lo que nos plazca. No te preocupes de nada que no sea expresar con palabras lo que sientes, sentiste, o imaginas sentir.

2. Una única trama

¿Conocéis el concepto de las subtramas? Olvidaos de ella en cuanto se trate de relatos. Al menos al principio. Tienes que tener claro qué quieres decir aquí.

Por ejemplo, en el relato ‘Monocromatic Kiss’, la trama principal es el pacto que el niño y el monstruo hacen. Podría hablar de los padres, podría hablar qué pasa después, pero yo he decidido contar solo esa parte, ese inicio. Podría convertirlo perfectamente en una novela, pero la gracia también está en dejar que la imaginación del lector cree su propia historia. Por supuesto que hay contexto, se entreve otras tramas, pero no me centro en ellas como lo hago con la principal.

3. Pocos personajes

Admítelo, escribir un relato no es igual que escribir ‘Canción de hielo y fuego’. No necesitas tantos personajes. Elige uno o dos que sean principales y olvídate del resto. Claro que pueden aparecer, pero tienes que tener en cuenta de que su función tiene que ser MUY importante y puntual.

Por ejemplo, en el relato titulado ‘En lo más alto de la torre’, puedo decir tranquilamente que hay 3 personajes: el príncipe (protagonista), la princesa (antagonista) y el padre de la princesa (el responsable en hacer que el prota se embarque en una aventura). Ya está. No hace falta más para crear una historia.

Incluso, los personajes pueden no importar directamente. En ‘Los muros’ no conocemos quiénes relatan la historia, no conocemos quiénes entran en la casa y, como podéis comprobar, no importa. Pueden ser demonios, fantasmas, zombies, lo que más os guste y, aun así, la historia no cambia.

4. Directo al grano

¡Oye!¡Detente ahí! Estoy viendo que quieres describir más de la cuenta. Tss *le pega con suavidad en la mano*, caca, eso no se hace.

En un relato tienes que ir directo al grano, a lo importante del asunto. Adórnalo como quieras, pero no divagues ni un segundo. Ten en cuenta que cada palabra es fundamental, cada palabra tiene que aportar algo nuevo a la historia.  Tienes poco espacio y no puedes desaprovecharlo en absoluto.

Ejemplo: ‘La promesa’ es un microrrelato de 69 palabras. Y en ellas nos cuentan que: ha ocurrido un secuestro, una persona se ha ofrecido a ayudar en la búsqueda, esa persona es la secuestradora.  Quizás podría haber hecho esta escena mucho más detallada, mucho más precisa (convertirlo en una novela). No es necesario. Recuerda que en un relato no hace falta ser extremadamente preciso. No tenemos que describir cómo es este personaje, cómo ha secuestrado a la chica o cómo tiene la cara dura de presentarse ante la familia. No hace falta. Es información que el lector puede rellenar de la manera que más le plazca.

5. Estructura introducción-nudo-desenlace

Puedes ayudarte de este recurso para escribir un relato y tener muy claro qué pasa en cada parte para no alargar demasiado la historia. Muchas veces lo usamos sin darnos cuenta. ¿‘Llamada nocturna’ sigue este esquema? Sí.

• Introducción: nos presentan los personajes.
• Nudo: los personajes quedan y deciden “destruir el mundo”.
• Desenlace: sus caminos se separan y todo sigue igual

No nos damos cuenta, pero ahí están.
Incluso las historias en las que hablamos de sentimientos pueden seguir esta estructura. ‘Con la misma piedra’ más o menos vemos la estructura.

• Introducción: el prota camina distraído por la calle.
• Nudo: rememora la relación desastrosa que ha tenido con una persona.  
• Desenlace: se choca con alguien y descubre que es la persona con la que ha mantenido esa relación.

Algo así quedaría la estructura de este relato.

6. Usa Writing Prompts

No sé la expresión en español para este término, pero es sencillamente que te dan una trama/una frase y, a partir de ahí, creas el relato. Para los que entiendan inglés, yo misma tengo un tablero de pinterest para esto (os lo dejo aquí https://www.pinterest.es/missshalott/write/writing-prompts/ para que le echéis un vistazo) o sé que hay un subreddit sobre el tema que pinta bastante interesante (https://www.reddit.com/r/WritingPrompts/).

Quizás no se os viene la inspiración de las musas para crear un relato, pero ya os digo que con los writing prompts os entrarán ganas de hacer ochenta relatos (o más).

7. Olvídate de las normas y haz lo que te plazca.

 Si algo mola de los relatos, es que puedes hacer lo que quieras. Puedes experimentar como más te plazca. ¿Un relato solo con diálogos? ¿Un relato sin usar la letra e? ¿Un relato sobre cómo una loncha de queso está presa en un sándwich? ¡Lo que quieras! Lo importante es que NO lo conviertas en una novela.  

Y hasta aquí puedo leer.  ¿Qué hay de vosotros? ¿Os atrevéis a escribir relatos después de estos consejillos?